Ayer Jueves realicé una salida porla zona sur del pueblo. No pintaba muy bien así que en el equipaje no faltó el paraguas. Quería comprobar en primer término si el nido de Dáuricas estaba vacío, y... en efecto, vacío. También quería ver si una zona de roquedos podría tener algún tipo de nido de rapaces nocturnas, pero tampoco. Lo que me salvó la tarde fue una pareja de Azores que andaban gritando mi presencia. Creo que también tienen a sus hijos por ahí dando vueltas, porque hubo momentos en los que controlaba por lo menos tres. Pude grabar bien al macho posado en uno poste metálico, y luego al macho y a la hembra en un chopo. El dimorfismo sexual de esta especie se aprecia claramente en el vídeo, pues la hembraes más pesada que el macho. Y volviendo para casa, unos cuantos azulones, con tres crías bajaban río abajo.
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