Pues 5 especies distintas en apenas 1 hora. Empecé buscando por el norte, por la zona del páramo, pero antes de eso, en la zona del antiguo vertedero, en una chopera, unos 10 Milanos Reales. Más tarde, ya en el páramo, mi primer avistamiento de un ejemplar de Aguilucho pálido, mucha ilusión de poder apreciar a este primo hermano del cenizo, y su majestuoso vuelo. Un poco más tarde, volviendo ya al pueblo, otro ejemplar de Milvus milvus. Por la granja de ovejas, nada de movimiento de necrófagos, pero sí algún que otro ejemplar de Milano Real. En total hoy he contado más de 25 ejemplares por todo el terreno del pueblo. Cerca de los Milanos, un tímido ejemplar jóven de Busardo Ratonero oteaba desde una rama de chopo. Y el momento de la tarde me lo regaló un ejemplar, nuevo en este blog y para mi, de Halcón Peregrino, que estaba posado en la atalaya del cernícalo, cerca del término conocido como "El Calero". En ese mismo lugar, pero en el río, una Garza gris, echaba a volar antes de que me diese tiempo a poner en marcha la máquina de vídeo. En dirección a la carretera, había algún que otro bando de Paloma torcáz, espantada quizás por el ejemplar de Halcón, que andaba por allí. A última hora de la tarde, un ejemplar de Cernícalo vulgar, oteaba desde su típica atalaya, un tendido eléctrico. Es curioso que, cuando me vió y se echó a volar, se posó en otro poste de la luz, pero no en la parte de arriba, si no en un peldaño del palo de hormigón, curioso. Y cuando me estaba acercando al poste, una Liebre se levantó y corrió como si le fuera la vida en ello, pues realmente hay veces que si el camuflaje no funciona, ¡¡¡patas para qué os quiero!!!.
Y por hoy nada más. Un saludo!
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